Los profesionales de la Unidad de Atención Paliativa han expresado su agradecimiento a los pacientes en una carta que resume los mensajes expuestos con motivo del  día internacional

Contenido de la carta:

A menudo el correo que llega al hospital suele traer una carta manuscrita. Otras veces, la expresión de gratitud ocupa las páginas de un periódico local. En este 9 de octubre, día internacional de los Cuidados Paliativos, hemos querido ser nosotros quienes muestren, personal y abiertamente, los sentimientos que surgen en el ejercicio de nuestra labor, nuestro profundo agradecimiento.

Los profesionales queremos reconocer la impagable experiencia que se obtiene al acompañar a personas en este momento de la vida. Estos textos son parte de nuestro relato:

“Creo que no hay nada más bonito como persona y cómo profesional de hacer sentir al quien sufre que no está sólo en esto y que vamos a acompañarle”. (Rakel Gorritxo. Responsable de Enfermería ESAD (Equipo de Soporte de Atención a Domicilio).

«Gracias por anclarnos al presente, por dar importancia a los pequeños detalles y normalizar las emociones. Por enseñarnos que todo suma» (Ana Belen Sanchez. Responsable de Enfermería – Hospitalización).

“Mi trabajo es una escuela de valores. Tengo el orgullo de ser médico en un  equipo de soporte a domicilio de cuidados paliativos. Cada vez que salgo de un domicilio lo hago siendo una persona un poco más completa”. (Dra. María Pardo. ESAD).

“Me quedo con sus consejos. Con la certeza de que la vida es hoy y ocurre ahora”. (Ana Belén Ochoa. Enfermera ESAD).

“En esta etapa surgen los momentos más bellos y se experimenta de la manera más pura, lo único que importa: el amor verdadero. (Marta Pozo. Enfermera ESAD).

“Con vuestro saber estar, nos dais una lección de vida. Nos enseñáis a afrontar la nuestra”. (Pilar Huarte. Responsable de Voluntariado).   

“Siento su confianza, la que abre la puerta de su intimidad, sus dudas, sus temores, sus sufrimientos, sus anhelos… siempre es fácil compartir alegrías, pero no lo es desvelar la angustia y la pena”. (Dra. Isabel Erquiaga).

“Albergo un sentimiento de gratitud: gracias por permitirnos entrar en sus casas y sus corazones”. (Dra. Catalina Hamon. ESAD).

“Agradecer las ganas de luchar para mantener la autonomía. Nos servís de ejemplo para seguir soñando y no abandonar”. (Iñaki Vicente San Martín. Responsable de Rehabilitación).

“Me sigue sorprendiendo la empatía, el vínculo tan fuerte que llega a establecerse”. (Marta García. Administrativa de la Unidad).

“Para mí los cuidados paliativos son mucho más que una especialidad médica. Son una filosofía de vida, es la oportunidad de descubrirse”. (Dra. Ana López del Castillo. ESAD).

Cuando me planteo el por qué sigo en este trabajo surge el agradecimiento: a la vida por haberme empujado a hacer lo que hago y a vosotros, pacientes y familiares, por ser compañeros de viaje en la vulnerabilidad, en el miedo y a la vez en momentos que atesoro de encuentro y luz, de aprendizaje sobre lo esencial”. (Yolanda Santesteban. Psicóloga Sanitaria).

“Necesitaría dar las gracias a mis pacientes, mis grandes maestros. He aprendido mucho de ellos, de su valentía, fuerza, ilusión, nobleza; de su sonrisa, sus palabras amables, sus lágrimas, su sinceridad… Gracias por dejarse cuidar. (Dra. Rocío Rios)

“Es mucho lo vivido juntos y perdurará siempre en la esencia de nuestros equipos”. (Dra. Teresa Puras. ESAD).

“La primera palabra que viene a mi mente es valentía, la segunda es confianza y la última es gracias, esa palabra que escuchamos antes de cerrar la puerta de vuestras casas y ahora hacemos nuestra”. (Dra. Leyre Pérez Ricarte. ESAD)

“Tan importante como asistir a un parto es asistir en el final de la vida. Poder ayudar a los pacientes y sus familiares en este el último capítulo de su historia, llena mi corazón “. (Nancy Sarango TCAE).

“Hay mucho por hacer cuando «ya no se puede hacer nada» y esto es lo que nos enseñan nuestros pacientes cada día. No enfocas igual tu vida cuando trabajas en cuidados paliativos y eso ocurre por todo lo que  aprendemos de nuestros pacientes y sus familias.  Gracias por enseñarnos a vivir”. (Dra. María González Ascarza. Jefe clínico Unidad Atención Paliativa)

“Con tu sonrisa es suficiente. Gracias.” (Gema Escalada. Trabajo Social).

«Un gesto, un silencio, una palabra, una mirada. Trabajar aquí es para mí un regalo que me permite ayudar y, en definitiva, humanizar.”Alberto Gutiérrez (SAER At. Espiritual)   

Hacemos nuestro el lema de este año 2021, «No dejar a nadie atrás: equidad en el acceso a los cuidados paliativos», un objetivo irrenunciable y la petición  de que estos cuidados formen parte de los sistemas de salud.

Quizá una frase pueda definir el trabajo y el empeño de los equipos de Atención Paliativa: intentar DAR VIDA hasta el último momento.

Gracias de corazón.

Unidad de Atención Paliativa